La crisis en la histórica láctea, pilar de la economía local, escala. ATILRA y los empleados realizaron una jornada de panfleteo en Ruta 5 mientras crece el temor por la parálisis total y la falta de respuestas de la gerencia de capitales venezolanos.
El conflicto en la usina láctea La Suipachense no cesa y, a medida que pasan los días, la tensión y el miedo en la localidad aumentan. Los trabajadores, en una nueva jornada de protesta, salieron hoy a la calle para visibilizar la grave situación de la empresa insignia de la ciudad.
Junto al gremio ATILRA, los empleados realizaron una entrega de panfletos en la Ruta 5 y el acceso Padre Brady. La acción se desarrolló sin interrumpir el tránsito y con asistencia de la Policía Comunal, buscando informar a la comunidad sobre la parálisis de la planta y la desesperante situación de las familias que arrastran casi tres meses de atraso en el cobro de sus haberes.